Día: 27 abril, 2021

FERNANDO VII. NOMBRAMIENTO DE PALAFOX COMO CAPITÁN GENERAL DE ARAGÓN. 1808

Posted on

La Junta Suprema, tras separar a Jorge Juan Guillelmi de la Capitanía General de Aragón, por su obediencia a Murat, y sufrir el asalto de su residencia y pasar preso a la Aljafería, designa en su sustitución a Juan de Palafox, tras su huída de Bayona a donde había acompañado a Fernando VII.

(España. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte A. H. N. Consejos).

            El Rey N. S. D. Fernando 7º y en su Real nombre la Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino ha conferido al Teniente General de sus Reales Ejércitos D. José Palafox y Melci, el empleo de Capitán General del Ejército y Reino de Aragón con la Presidencia de aquella Real Audiencia, que ha resultado vacante por sepración de Jorge Juan de Guillelmi. Tendrase entendido en la Cámara para su cumplimiento.

            El Conde de Floridablanca.

            En el Real Palacio de Aranjuez a 2 de noviembre de 1808.

            Al Presidente del Consejo = Madrid 5 de noviembre de 1808 = Cúmplase lo que S. M. manda.

*Selección y transcripción de Enrique Giménez López, 2017, bajo licencia Creative Commons “Reconocimiento – No comercial”. El autor permite copiar, reproducir, distribuir, comunicar públicamente la obra, y generar obras derivadas siempre y cuando se cite y reconozca al autor original. No se permite utilizar la obra con fines comerciales.

88x31

CARLOS III. PREPARATIVOS EN FERROL PARA EL TRANSPORTE A ITALIA DE LOS JESUITAS PROCEDENTES DE PUERTOS CANTÁBRICOS. 1767

Posted on

El Intendente de Marina de Ferrol, Pedro de Hordeñana, informa al Secretario de Marina, Julián de Arriaga, de sus gestiones para suministrar lo necesario a los jesuitas procedentes de San Sebastián, Bilbao, Santander y Gijón y que, escoltados por embarcaciones de guerra surtas en Coruña, deben partir hacia el puerto romano de Civitavecchia.

(España. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte A. G. S. Marina legajo 724)

            Exmo. Sr.

            Muy Sr. mío: en Real Orden de 3 del corriente con inclusión de las comunicadas a los Ministros de San Sebastián y Bilbao, se sirve V. E. instruirme de deberse congregar en Coruña 780 religiosos de la Compañía, los 280 de San Sebastián y Bilbao, los 400 de Santander y Gijón, y los 100 restantes de este Reino; y que habiendo de transportarse a Civitavecchia en la conformidad que V. E. tiene a bien advertirme, cuide yo de que se verifique con toda la posible decencia y comodidad.

            En su satisfacción debo decir a V. E., que aunque únicamente faltan embarcaciones para los últimos ciento, he considerado, que aun cuando en San Sebastián, Bilbao y Santander las hubiesen encontrado de alguna comodidad, no sucederá lo mismo en Gijón, donde solo habrá meros Pataches indecentes e incómodos; y con consideración a éste, y demás incidentes, he detenido cinco Saetías, y hay también una Fragata para usar del todo o parte de estos buques, según dicte la necesidad y convenga a la decencia y comodidad, que sobre ser debidas se recomiendan de orden del Rey por V. E., y contemplo que en esta parte lograrán los religiosos cuanto puedan apetecer.

            Para reemplazar los víveres que consuman hasta la Coruña, reforzarlos, y surtir algunas cosas precisas para que nada falte en la navegación, quedo tomando las medidas necesarias, y aun para ganar tiempo y ahorrar no poco dinero he escrito al Capitán General e Intendente del Reino, pidiendo me faciliten la mantelería y demás útiles, que sin duda se habrán comprado para el servicio de los mismos Jesuitas durante su actual manutención en la Coruña por cuenta de la Real Hacienda.

            No se omitirá diligencia ni medio conducente a que estos religiosos vayan asistidos y tratados con toda la posible decencia y comodidad; y como parece consiguiente a su reunión en la Coruña, sobre que me pondré de acuerdo con aquel Capitán General, la partida desde este Puerto, espero tenga V. E. a bien comunicarme sus últimas órdenes, para que con arreglo a ellas pueda yo prevenir lo conveniente al Ministro de la expedición D. Enrique de Torres para su gobierno con especialidad al arribo a Civitavecchia.

            Nuestro Señor guarde a V. E. muchos años como deseo.

            Esteiro, 8 de abril de 1767.

            Pedro de Hordeñana a Julián de Arriaga.